01/02/2013
Mucho se ha hablado de la hipoteca inversa en los últimos años, una opción para las personas de edad avanzada que les permite convertir a dinero el valor patrimonial que representa la propiedad de su vivienda. Este producto, sin embargo, no ha tenido la implantación y desarrollo esperado en España y el propio Gobierno piensa que sería necesario modificar su normativa.
Recordemos que una hipoteca inversa es un préstamo hipotecario por el cual un banco o caja paga una renta mensual a una persona mayor a cambio de que ésta utilice su vivienda como garantía. La renta que paga la entidad financiera va a depender del valor de la vivienda y de la edad del cliente. Así, a mayor valor y a mayor edad, mayor renta mensual.
Las principales ventajas que algunas entidades especializadas en este tipo de hipoteca, como Optima Mayores, apuntan son:
- El titular conserva la propiedad de la casa.
- Se puede liquidar la operación en cualquier momento.
- La renta que percibe el titular no tributa.
- La revalorización real de la vivienda es para el propietario.
- La deuda no es exigible hasta el fallecimiento del titular
Hasta el momento, algunas asociaciones y el propio Gobierno no están satisfechos con los resultados obtenidos y ya han expresado su deseo de cambiar su normativa. Pero ¿por qué no se ha tenido ni el desarrollo ni la aceptación esperada?
El propio Ejecutivo considera que se ha debido al desinterés mostrado por la banca hacia este producto financiero y que la seguridad jurídica del reglamento que la desarrolla no es la óptima. Y es que el actual reglamento, recogido en la orden de Transparencia y Protección del Cliente de Servicios Bancarios de octubre de 2011, prevé que en la contratación de las hipotecas inversas sea obligatoria la entrega de las ofertas vinculantes, la prestación de un servicio de asesoramiento independiente y previo; que el notario compruebe que dicho asesoramiento ha tenido lugar y advierta si ha sido desfavorable; y que la Ficha de Información Precontractual y la de Información Personalizada se ajusten a ciertos requisitos.
Mientras que las llamadas en Estados Unidos “hipotecas invertidas” han alcanzado unos niveles de popularidad importantes, en países como el nuestro dista mucho de haber logrado un desarrollo aceptable.
Cuéntanos si conoces a alguien acogido a este tipo de hipoteca.