31/03/2020
El caos es el enemigo de la tranquilidad, así que si quieres rebajar el estrés durante la cuarentena, entrégate a la tarea de tener la casa en orden y ya verás como lo agradeces. Aquí va una hoja de ruta básica.
Quizá no te suene de nada Marie Kondo, pero ella ha sentado las bases de algo que parecía intrascendente, pero que estos días nos estamos dando cuenta de que es vital: el orden en casa. ¿Estamos perdidos entre tanto lío? Estos cinco consejos te ayudarán a poner todo en tu sitio.
- Mantener los espacios de acuerdo a sus usos es fundamental: que el salón no se convierta en el cuarto de los niños ni en tu gimnasio de manera permanente. Una vez hayáis usado ese lugar para algo diferente que ver la tele, descansar o comer, retirad todo aquello que no corresponda (fuera esterillas, juguetes, etc.).
- Aunque hayas hecho del chándal tu uniforme básico, evita acumular un montón de ropa lavada sin doblar ni planchar. Eliminar de tu vista todo aquello que indica desorden hará más llevadero y relajado el confinamiento.
- Procrastinar, ahora más que nunca, está prohibido. ¿Cuántas veces te ha pasado que no encuentras ese pantalón que estabas buscando? Es hora de que emprendas esa labor que tantas veces has aplazado: revisar tu ropero, tirar lo que no te sirva o no te vayas a poner nunca más, y doblar y apilar organizadamente zapatos, ropa y complementos.
- El baño suele ser un revoltijo de botes, herramientas de cuidado personal, botiquín, toallas, etc. Emprende el zafarrancho de limpieza clasificando todo y deshazte de aquello que ya ha cumplido su ciclo de vida (igual no necesitas 10 toallas), de los medicamentos caducados, etc. y deja a la vista aquello que más utilizas más a menudo.
- Si tienes una tendencia acumuladora por naturaleza, es el momento de despedirte de ella. Ahora que tienes tiempo aprovéchalo en tu favor. Revisa todas esas revistas, libros, CDs, recuerdos, apuntes, etc. que tienen polvo de hace años y separa en bloques aquello de lo que puedes prescindir, donar, guardar en el trastero y tirar. Ganarás espacio para nuevas cosas y ganarás en tranquilidad.
